Esto realmente es algo increíble, anoche luego de venir de Moca y de ver una de las manifestaciones mas patéticas que haya presenciado, de un sistema putrefacto y desesperado, que ha empezado a dar patadas a lo loco, cada vez mas débiles y predecibles y que terminan de enseñar la dictadura que se ha instaurado en nuestra bella y rica isla, llena de gente buena y trabajadora, que no se merece ni quiere esto, me puse a meditar en esta tragicomedia que se está mostrando en nuestro escenario actual.
Esta situación crece como una bola de nieve y si bien es triste, entiendo que es la primera vez que con un juego trancado y con el doble seis en la mano, «SE GANA», ganamos todos.
Se preguntaran de que carajos estoy hablando, pues bien les explico:
Es de todos saber que nuestro sistema colapsó en todos los aspectos: social, económico, político, espiritual y demás. Esto acarrea muchísimas pérdidas, hasta de vidas, sí, de vidas. Las personas que mueren por falta de medicamentos en nuestros hospitales, los que mueren por accidentes de tránsito por no hacerse cumplir las leyes y muchos otros casos que todos conocemos y son producto de este modelo inoperante.
Todo esto ha sido el catalizador de una actitud, una reacción, una ebullición que se ha manifestado de forma positiva en una población que estaba dormida, pasiva pero no ajena a lo que sucedía.
La población está confundida, tanto el oficialismo como la ciudadania. El PLD se ha autoinculpado y ha acaparado la totalidad de la culpa de todos los hechos que han venido aconteciendo en detrimento de nuestra sociedad en los ultimos 80 años. Debido a una serie de manifestaciones en toda la geografía nacional, han cogido toda la presión del mundo, por su gran actuación y responsabilidad en la magnificación de los hechos en la última década y la ciudadanía aún más turbada cuestiona el momento histérico en que se desenvuelve en nuestro ambiente, se cuestiona: ¿y ahora qué?, ¡las marchas no son suficientes!, ¡debemos hacer más!.
Pues bien dejenme decirles que ya ganamos varias partidas aún pasando con fichas:
- Se perdió el miedo.
- Estamos despiertos.
- Estamos unidos.
- Estamos actuando como colectivo.
- Estamos actuando como grupos y movimientos por separado.
- Estamos actuando como ciudadanos.
- Por primera vez estamos jugando en la misma mesa, en la misma cancha que juega el gobierno y le hemos tumbado el pulso varias veces.
Si si algo está claro es que no solo queremos y exigimos justicia pero lo mas importante es que «QUEREMOS GENERAR CAMBIOS, DEMANDAMOS QUE COSAS COMO LAS QUE NOS AFECTAN Y HAN AFECTADO, NO VUELVAN A SUCEDER Y ESTAMOS DECIDIDOS HA LOGRARLO».
Ya hemos obtenido muchísimos triunfos en esta arena que estamos combatiendo y los que vienen serán más grandes y mejores. Métande eso en la cabeza, hay una colectividad demostrando en las calles, hay un equipo de juristas clase A accionando, vienen medidas para seguir desenmascarando las acciones dolosas que acontecen en toda la geografía nacional y que no tienen nada que ver con Odebrecht, la corrupción está en todos lados y vienen otras sorpresas que darán golpes certeros que tambalearán el tablero.
Por otro lado ya ganamos la atención de la prensa e instituciones internacionales, tenemos el respaldo involuntario, fortuito y coincidencial de gobiernos, fiscales y casos que aceleran esta metamorfosis que vivimos y pronto seremos una crisálida que estirará sus alas y volará en un cielo justo, veremos ese nuevo amanecer que pensábamos que no veríamos.
La caída está sucediendo, es inminente, estamos siendo parte de esta. Ya el acorralamiento es desde todos los flancos, de afuera y de dentro, y es inevitable.
Señores, ¡es cuestión de tiempo para establecer nuevas reglas de juego que sean iguales para todos y que la trampa no tenga cabida ni pueda pasar por alto!
Por esto les digo, ganamos trancando el juego y quedándonos con el doble seis en la mano.
¡Estas dos tristes realidades tienen un final feliz para todos!
¡Lo estamos logrando juntos!
