Dayana Reinoso Romero, la joven a quien se le había concedido prisión domiciliaria debido a un diagnóstico de cáncer cervical, falleció tras una ardua batalla contra la enfermedad. Reinoso, de 31 años, estaba cumpliendo una condena de cinco años de prisión por haber apuñalado a un hombre que, según su testimonio, intentó violar a sus hijas.
La noticia fue confirmada por su abogado, Jean Cristofer Pérez, quien lamentó el deceso de su cliente al declarar que «el cáncer la venció». Pérez aprovechó la ocasión para hacer un llamado a las autoridades penitenciarias, instándolas a cumplir con los protocolos de cheques médicos periódicos para las personas privadas de libertad, considerándolos un derecho fundamental.
Reinoso fue liberada del Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo-Mujeres el 9 de febrero de 2024, tras la modificación de su condena a prisión domiciliaria debido a su delicado estado de salud.
