Somos Pueblo.- Este 27 de febrero, la República Dominicana celebra el 181 aniversario de su Independencia Nacional, fecha que marca el momento en que el país se libró de la ocupación haitiana y se constituyó como una nación libre y soberana.
El 27 de febrero de 1844, el trabucazo del patriota Matías Ramón Mella en la Puerta del Conde selló el inicio de la independencia dominicana, tras 22 años de ocupación haitiana. Este hecho histórico fue el resultado de la lucha organizada por Juan Pablo Duarte, Francisco del Rosario Sánchez y Matías Ramón Mella, quienes lideraron la sociedad secreta La Trinitaria, fundada en 1838 con el fin de instaurar una nación libre de toda dominación extranjera.
La independencia fue un proceso complejo, marcado por enfrentamientos militares y diplomáticos, y la consolidación de un proyecto nacional que, hasta la fecha, sigue en construcción. En ese sentido, la lucha de los trinitarios no solo buscaba la separación de Haití, sino también la formación de un Estado con instituciones democráticas y una ciudadanía comprometida con el desarrollo del país.
Como cada año, el Poder Ejecutivo encabeza los actos conmemorativos de la Independencia Nacional, con ceremonias oficiales y la tradicional rendición de cuentas del presidente de la República ante la Asamblea Nacional. Esta alocución no solo es un repaso de las obras y gestiones del gobierno, sino también un termómetro de la situación política, económica y social del país.
En este contexto, la República Dominicana enfrenta retos significativos en materia de gobernanza, seguridad, educación y economía. La inflación y el costo de la vida han sido temas recurrentes en el debate público, al igual que las preocupaciones por la transparencia en la administración de los recursos del Estado. Además, las tensiones en la frontera con Haití continúan siendo un desafío clave para la política exterior del país.
En el ámbito político, la proximidad de los próximos comicios genera expectativas sobre el rumbo del país y el futuro de las reformas necesarias en distintas áreas, como la justicia, la seguridad ciudadana y la calidad de la educación. En este sentido, la celebración de la independencia también invita a un análisis crítico sobre el cumplimiento de los ideales democráticos que motivaron la lucha de los padres fundadores.
Más allá de los actos protocolares, el aniversario de la independencia es una oportunidad para que la sociedad dominicana reflexione sobre el papel de la ciudadanía en la consolidación de la democracia. La participación activa de los ciudadanos en los asuntos públicos, el fortalecimiento de la institucionalidad y el compromiso con el bienestar común son elementos fundamentales para honrar el sacrificio de quienes lucharon por la libertad del país.
En un momento en que el país enfrenta desafíos tanto internos como externos, recordar la gesta de 1844 es también un llamado a la acción y la responsabilidad colectiva. La independencia no solo se celebra, sino que también se ejerce día a día con una ciudadanía informada, crítica y comprometida con el futuro de la República Dominicana.
