Somos Pueblo. – Dos hermanos perdieron la vida en un trágico accidente en la autopista del Coral durante la madrugada del domingo. Andry y Ángel Guerrero, hijos del profesor universitario Domingo Guerrero, fueron arrollados por un autobús del transporte hotelero conocido como las “guaguas amarillas” mientras se desplazaban en motocicleta hacia la zona de Bávaro para cobrar una suma de dinero.
El fatal suceso ha causado gran consternación en la comunidad de 21 de Enero, donde residían los hermanos, así como en el entorno académico de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), donde su padre imparte docencia. Mientras las autoridades investigan las circunstancias del accidente, crecen las preocupaciones sobre la seguridad vial en esta transitada carretera, donde la falta de señalización y medidas de prevención han sido denunciadas en reiteradas ocasiones.
La autopista del Coral, una de las principales vías que conecta La Romana con Punta Cana, ha sido escenario de múltiples accidentes en los últimos años. Conductores han alertado sobre deficiencias en la infraestructura, incluyendo tramos recientemente repavimentados sin la instalación de los denominados “ojos de gato”, elementos cruciales para la visibilidad nocturna. Estas omisiones representan un alto riesgo, especialmente en una carretera de alto flujo vehicular, donde circulan tanto turistas como empleados del sector hotelero.
Las cifras del Observatorio Permanente de Seguridad Vial (OPSEVI) reflejan una preocupante tendencia. En 2023, se registraron 24 muertes en la autopista del Coral, superando los 17 fallecimientos de 2022. Desde 2016, la cantidad de víctimas fatales en esta vía ha oscilado entre los 14 y 29 fallecidos por año, lo que evidencia la urgencia de medidas efectivas para reducir la siniestralidad.
Factores como el exceso de velocidad de algunos autobuses de transporte hotelero, la circulación de motocicletas en condiciones de poca visibilidad y la falta de controles viales han sido señalados como causas recurrentes de los accidentes en esta autopista. Conductores frecuentes de la zona han denunciado la falta de patrullaje y la necesidad de reforzar la fiscalización de los límites de velocidad para evitar más tragedias.
Ante esta situación, expertos en movilidad han reiterado la importancia de mejorar la señalización, instalar dispositivos de control de velocidad y aumentar la presencia de agentes de tránsito en los puntos más críticos de la autopista. Además, han subrayado la necesidad de campañas de concienciación dirigidas tanto a motociclistas como a choferes del transporte colectivo, sectores con alta participación en los accidentes de tráfico en el país.
Mientras la comunidad lamenta la pérdida de Andry y Ángel Guerrero, el clamor por justicia y medidas concretas se hace más fuerte. La tragedia de estos dos hermanos se suma a una larga lista de víctimas en una autopista que, pese a su importancia estratégica, continúa presentando fallas de seguridad que ponen en riesgo la vida de quienes la transitan.