Según el diario español The Objective, una investigación profunda de la Guardia Civil española ha sacado a la luz un complejo entramado de hidrocarburos que vincula a la República Dominicana como un eslabón esencial en una red de evasión de sanciones internacionales. Este esquema ha permitido que grandes cantidades de crudo venezolano, específicamente el tipo Merey, fueran “blanqueadas” para poder ingresar al mercado europeo, sorteando así las sanciones impuestas al régimen de Nicolás Maduro por parte de la Unión Europea y Estados Unidos desde 2018.
La operación, encabezada por figuras como Víctor de Aldama, Koldo García y José Luis Ábalos, usaba la República Dominicana como país intermediario. El esquema implicaba hacer pasar el petróleo venezolano como dominicano, facilitando su refinamiento en suelo dominicano para cumplir con los estándares europeos antes de su exportación a España. Este crudo tipo Merey es conocido por su alta densidad y elevado contenido de azufre, características que no cumplen con las regulaciones europeas sin un procesamiento previo. Al refinarse y adaptarse a estos requisitos, el crudo venezolano podía ingresar a Europa, ocultando así su verdadero origen y eludiendo las sanciones internacionales vigentes.
Un “Paraíso Financiero” en el Caribe
No solo se utilizaba a la República Dominicana para el refinamiento del petróleo, sino también como base financiera. Se descubrió que en el país se crearon varias “sociedades al portador” —estructuras empresariales típicas de paraísos fiscales— que permitían a los verdaderos dueños mantener su identidad oculta. Estas sociedades, cuyo control puede transferirse sin revelar a los propietarios, facilitaban el movimiento de capitales en una red que incluía operaciones en Portugal, Luxemburgo, Brasil y otros países, generando un flujo de miles de millones de euros.
Aparentemente, la red consideró inicialmente establecer una refinería en Tenerife, proyecto para el cual sostuvieron una reunión en 2022 con el entonces presidente de las Islas Canarias, Ángel Víctor Torres. Sin embargo, al no concretarse esta iniciativa, optaron por continuar sus actividades en República Dominicana, donde además de ocultar el origen del petróleo, camuflaban los beneficios obtenidos en cuentas de empresas vinculadas a la red. Esto les permitió blanquear las ganancias y evadir impuestos de forma masiva, afectando las arcas de varios países europeos.
Investigación Internacional en Marcha
Este caso ha impulsado a las autoridades españolas a colaborar internacionalmente para desmantelar completamente esta red. Se han emitido comisiones rogatorias a múltiples países involucrados en las transacciones, incluidas la República Dominicana, Portugal y Luxemburgo, para investigar a fondo las cuentas y las estructuras empresariales que facilitaban el lavado de capitales. El Juzgado Central de Instrucción N°3 de la Audiencia Nacional de España, en coordinación con la Fiscalía Anticorrupción, dirige la investigación y hasta el momento ha llevado a cabo varias detenciones en territorio español, en lo que representa solo el comienzo de un esfuerzo por desarticular la estructura de esta red internacional.
La trama de hidrocarburos desmantelada representa uno de los mayores fraudes fiscales y de evasión de sanciones de los últimos años. La capacidad de esta red para utilizar a la República Dominicana como base estratégica evidencia las debilidades en el control de los flujos internacionales de hidrocarburos y subraya la importancia de una vigilancia internacional reforzada para combatir el crimen financiero transnacional.