Somos Pueblo | El reporte de la presunta avería en el servicio de Internet de la empresa Claro ha provocado una reacción de enojo significativa entre la base de usuarios. La interrupción del servicio ha afectado particularmente a aquellos profesionales que operan bajo la modalidad de teletrabajo, quienes expresan una profunda preocupación por las consecuencias laborales.
Los usuarios que dependen de una conexión estable para sus actividades laborales están reclamando públicamente que la falta de servicio podría resultar en la pérdida de sus puestos de trabajo. Esta situación eleva la gravedad de la incidencia de una simple falla técnica a una crisis de productividad con impacto directo en los ingresos.
Hasta el momento, la empresa de telecomunicaciones Claro no ha emitido un comunicado oficial que ofrezca una explicación técnica, una disculpa o una estimación de tiempo para el restablecimiento total del servicio. La ausencia de información oficial intensifica la frustración y la ansiedad de los clientes.
Se reitera la necesidad de que la empresa se pronuncie a la brevedad posible para gestionar la emergencia y ofrecer soluciones alternativas o compensaciones a los usuarios afectados, cuya estabilidad laboral está siendo comprometida por la duración de la interrupción. Los clientes exigen una respuesta rápida ante la presunta pérdida económica.
