El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha extendido una invitación oficial al presidente de China, Xi Jinping, para asistir a su ceremonia de toma de posesión el próximo mes, en un gesto diplomático que contrasta con sus recientes amenazas de imponer altos aranceles a los productos chinos.
La secretaria de prensa entrante de Trump, Karoline Leavitt, confirmó la invitación este jueves, aunque señaló que aún no se ha confirmado la asistencia de Xi Jinping.
“Este es un ejemplo de cómo el presidente Trump fomenta un diálogo abierto con líderes de países que no son solo aliados, sino también adversarios y competidores”, declaró Leavitt durante una entrevista en Fox News. “Como vimos en su primer mandato, está dispuesto a hablar con cualquiera, siempre priorizando los intereses de Estados Unidos”.
La invitación llega en un momento de tensiones económicas entre ambas naciones, lo que subraya la compleja relación entre Estados Unidos y China, marcada por desafíos en comercio, tecnología y seguridad global. La respuesta de Xi Jinping a esta invitación podría tener implicaciones significativas para la dinámica diplomática entre las dos potencias.