En San Antonio de Guerra, provincia Santo Domingo, la tienda china «20 y 10» se encuentra en el centro de una controversia tras vender pantalones escolares con el logo del Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (Inabie). La propietaria del establecimiento afirmó que los uniformes fueron adquiridos legalmente de una fábrica y que posee la factura que respalda la compra. «Yo compré a una fábrica. Yo tengo factura», declaró la dueña.
Un representante del negocio ofreció más detalles sobre la situación, indicando que la venta de estos pantalones con el sello del Inabie se debió a un excedente en la producción. «Lo que pasa es que a la compañía le sobra. Porque mira, ellos le venden al Gobierno, ¿verdad?, pero eso le sobra, el Gobierno no le pide tanto», explicó el encargado, de nacionalidad china.
Por otro lado, Francisco Valdez, dueño de la importadora Arece, que se encarga de fabricar estos uniformes, explicó que el incidente fue resultado de un malentendido por parte de un empleado. Según Valdez, 36 pantalones que no pasaron el control de calidad del Inabie debían ser descartados, pero accidentalmente se mezclaron con otro pedido.
En un comunicado, Valdez afirmó que estos uniformes defectuosos estaban listos para ser desechados, pero que, «por confusión, alguien de nuestro equipo las entregó en un pedido despachado hacia un cliente al cual le confeccionamos miles de piezas».
La importadora también ofreció disculpas públicas a la sociedad y al Gobierno dominicano, específicamente al INABIE, por el error cometido. «Errar es de humanos, pero reconocer y pedir disculpas es de sabios», concluye el comunicado difundido a los medios.
