Franklin Franco, padre de Marisol Mercedes Franco, pareja de César el Abusador, a quien las autoridades buscan capturar por encabezar una red de narcotráfico, manifestó que el único pecado de su hija ha sido ser la mujer “de ese señor” y negó que él haya sido narcotraficante en los años 1980, como se le atribuye en reportajes periodísticos y en las redes sociales.
“Yo no sé el porqué a mi hija se la han llevado, porque yo no vi que en Colombia a la esposa de Pablo Escobar se la llevaron presa. Tampoco vi en México que a la esposa de El Chapo Guzmán se la llevaron presa. Mi hija no tenía que saber o no saber qué hacía o que no hacía ese señor… el único pecado que ella ha cometido es ser mujer de ese señor”, dijo Franco.
“He visto últimamente en las redes sociales y en la prensa poniéndome a mí como que yo era el capo de los años 80′. Yo sí tuve un caso, estuve preso en los Estados Unidos por un caso de violación a la Ley de Migración, no por narcotráfico ni falsificación”, aclaró.
Dijo que por ese caso a él tenían que dictarle de uno a diez meses, pero que el juez que le tocó era racista y dada a esas circunstancias, lo condenó a tres años.
“Yo me escapé de la prisión, regresé a la República Dominicana, llamé al oficial federal que me estaba reclamando por qué lo había hecho y le eché tres San Antonio”, manifestó.
Expresó que ese oficial se empecinó en que a él lo extraditaran nuevamente para los Estados Unidos y que se sumó que en República Dominicana había un congresista norteamericano, Charles Rangel, quien recibió información para perjudicarlo, por parte de un funcionario que quería sacarlo de circulación porque su empresa competía con la de él.
“Y le dieron una información a ese congresista diciendo que yo era una persona que tenía problemas en los Estados Unidos y que estaba lavando dinero. A lo mío yo no le llamo prisión, yo estaba secuestrado, porque a prisión va el que comete un hecho, yo nunca cometí un hecho”, dijo.
Aclaró que esa persona que dio información al congresista y al presidente Joaquín Balaguer en ese entonces (el político que quería sacarlo de circulación) ya murió y no venía al caso mencionar su nombre.
“Qué dijo Balaguer: ‘investíguenlo’, eso era ‘métanlo preso’. La embajada no investigó lo suficiente y empezaron a meterle presión a Balaguer, me pusieron un expediente sin ningún fundamento”, señaló.
Manifestó que tuvo ocho sentencias de descargo, incluyendo tres de la Suprema Corte de Justicia y que aún así lo mantenían preso, y que un día en el 1999 lo soltaron basando el caso en el expediente que tenía en los Estados Unidos, porque aquí no había fundamento.
Dijo que quiso hacer la aclaración porque en la actualidad hay personas que no le conocen porque el caso fue hace más de 20 años, y solo se quedarían con lo que está circulando “de manera perversa” por las redes.
“Me juzgaron aquí por la fuga de la cárcel de Estados Unidos y yo el tiempo que tenía preso en mi país, ya era más que la condena que se le daba a una persona por fuga”, resaltó.
Llamó a todo el que lo desee saber al respecto, a que investigue y vea su expediente y todos los descargos que tuvo.