Somos Pueblo – El líder adjunto de Hezbollah, Naim Qassem, declaró este viernes que la organización chiíta libanesa no contempla desarmarse en la actual coyuntura regional y que cualquier iniciativa de diálogo dependerá, según afirmó, de la eliminación de lo que considera una amenaza constante proveniente de Israel.
“No abandonaremos nuestra fe ni nuestra fuerza, estamos listos para la confrontación. No habrá rendición ni entrega de las armas de la resistencia, e Israel no nos las va a quitar”, sostuvo Qassem durante un discurso transmitido por medios de comunicación cercanos al grupo.
En su intervención, el dirigente señaló que el armamento en manos de Hezbollah representa un freno fundamental a la expansión del Estado israelí y aseguró que dicha capacidad militar es “imprescindible” para resguardar la soberanía del territorio libanés.
“La rendición nos dejará sin nada. Aprendamos de las experiencias de la región y del mundo”, añadió, al tiempo que subrayó la importancia de mantener lo que denominó como una “resistencia activa” frente a las amenazas externas.
Hezbollah, considerado grupo terrorista por países como Estados Unidos, Israel y varias naciones europeas, mantiene una estructura armada paralela al Ejército libanés, lo que ha generado controversias tanto dentro como fuera del Líbano respecto a su rol político y militar en la región.