Somos Pueblo — Más de 600 ciudadanos haitianos en situación migratoria irregular abandonaron voluntariamente el territorio dominicano durante el pasado fin de semana, tras el aumento de los operativos realizados por las autoridades en diversas zonas del país, particularmente en las localidades de Friusa y Mata Mosquito, donde se concentra una significativa población extranjera sin documentación.
Este éxodo voluntario representa un incremento superior al 300% en comparación con días anteriores, según datos suministrados por las autoridades, marcando un cambio sustancial en el comportamiento migratorio en la frontera norte, específicamente en el paso fronterizo de Dajabón.
Operativos con respaldo militar
La Dirección General de Migración ha intensificado sus acciones de interdicción en todo el país, focalizándose en sectores donde se ha detectado una presencia elevada de ciudadanos extranjeros en condición irregular. En esta labor participan de forma activa unidades del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea, integradas por batallones especializados de la Policía Militar Electoral y de Control Migratorio, que actúan de manera coordinada bajo la supervisión del Ministerio de Defensa.
El ministro de Defensa, teniente general Carlos Antonio Fernández Onofre, ha estado presente en el terreno supervisando personalmente los operativos. De acuerdo con el reporte oficial, su presencia responde al interés del alto mando militar de garantizar que las acciones se ejecuten de manera eficaz, respetando los protocolos establecidos y contribuyendo al restablecimiento del orden en las zonas afectadas.
Contexto de las medidas
Las acciones ejecutadas forman parte de un plan nacional dirigido a fortalecer el control fronterizo y asegurar el cumplimiento de las leyes migratorias de la República Dominicana. Según voceros oficiales, este plan contempla una serie de medidas sostenidas en el tiempo, orientadas a contener el flujo migratorio irregular y a reducir el uso de rutas no autorizadas por parte de personas que intentan ingresar al país sin cumplir con los requisitos legales correspondientes.
Las zonas de Friusa, en el municipio de Higüey, y Mata Mosquito, en el entorno de Bávaro, han sido señaladas como puntos de alta concentración de inmigrantes haitianos sin estatus legal. En estas áreas, la presión de los operativos ha motivado a numerosos extranjeros a retornar por voluntad propia a su país de origen, en muchos casos por temor a ser detenidos o deportados.
Coordinación interinstitucional
El despliegue de los operativos es resultado de una estrategia interinstitucional entre la Dirección General de Migración y el Ministerio de Defensa, con el apoyo logístico y operativo de las fuerzas armadas. Esta colaboración ha permitido ampliar la cobertura de las intervenciones y aumentar la presencia militar en zonas urbanas y rurales, donde se ha identificado un incremento en la inmigración irregular.
Funcionarios de Migración han confirmado que los operativos se mantendrán activos en todo el territorio nacional en los próximos días, como parte de una política de vigilancia constante, orientada a garantizar el respeto a la soberanía nacional y a preservar la estabilidad social en las comunidades impactadas por la migración no regulada.
Perspectivas a futuro
La intensificación de los controles fronterizos y la ejecución de operativos migratorios han generado una respuesta inmediata por parte de la población extranjera, lo que evidencia el impacto directo de las medidas adoptadas. Sin embargo, las autoridades insisten en que estas acciones no deben interpretarse como medidas de represión, sino como mecanismos legítimos de aplicación de la ley.
En lo adelante, se prevé que el Ministerio de Defensa y la Dirección General de Migración continúen afinando los procedimientos operativos, garantizando que se respeten los derechos fundamentales de las personas intervenidas y que el proceso migratorio se mantenga dentro de los parámetros legales vigentes.
