Somos Pueblo – El Ministerio Público sostiene que los propietarios de la discoteca Jet Set, Antonio y Maribel Espaillat, habrían colocado de manera progresiva una serie de estructuras pesadas sobre el techo del establecimiento, sin realizar estudios técnicos que garantizaran la capacidad de la estructura para soportar dicha carga.
La información fue ofrecida por el órgano acusador a través de un comunicado, luego de haber depositado la solicitud de medida de coerción contra ambos imputados, como parte de la investigación por el colapso del techo del centro nocturno, ocurrido el pasado 8 de abril.
Según el Ministerio Público, entre los elementos instalados en el techo figuran casetas técnicas, ductos, unidades de climatización de gran tamaño —incluyendo seis aires acondicionados de entre 15 y 20 toneladas cada uno— y tinacos de agua.
El documento indica que estas adiciones se realizaron con soluciones “paliativas e inadecuadas”, supuestamente con el fin de reducir costos, sin tomar las precauciones técnicas necesarias.
Además, el Ministerio Público afirma que Antonio y Maribel Espaillat estaban plenamente informados sobre las condiciones del techo. De acuerdo con la acusación, recibieron múltiples advertencias por parte de empleados del local, acompañadas de reportes visuales como fotografías y videos que evidenciaban la caída de escombros y señales de deterioro.
“Antonio Espaillat y Maribel Espaillat tuvieron conocimiento directo y constante de los graves problemas que presentaba el techo (…). A pesar de estas advertencias explícitas sobre la caída de escombros y el peligro inminente, optaron por ignorarlas”, señala el Ministerio Público.
La medida de coerción solicitada busca garantizar la comparecencia de los imputados durante el proceso judicial que se desarrolla tras el desplome, que provocó la muerte de decenas de personas y dejó a más de un centenar con lesiones. Las investigaciones continúan en curso.
