Somos Pueblo – Santo Domingo, 16 de junio de 2025 – La Operadora Metropolitana de Servicios de Autobuses (Omsa) opera actualmente con una flotilla de 100 autobuses para transportar diariamente entre 70,000 y 75,000 usuarios en el Gran Santo Domingo, Santiago y Barahona. Sin embargo, la entidad enfrenta un presupuesto limitado y una creciente urgencia de renovación de vehículos para mantener la calidad y cobertura de su servicio.
Con un presupuesto anual de 2,200 millones de pesos, Omsa cubre los costos operativos, incluidos los salarios de unos 2,700 empleados. Aunque el personal se ha reducido en comparación con años anteriores, el gasto en nómina ha aumentado debido a mejoras salariales. Según la institución, el 54 % de los empleados ganaba anteriormente 10,000 pesos, cifra que fue ajustada a 25,200 pesos mensuales.
Demanda creciente y necesidad de inversión
El administrador general de Omsa, Radhamés González, destacó que la entidad necesita una “inyección urgente” de nuevos autobuses, especialmente en corredores exclusivos como los que conectan con Ciudad Juan Bosch, debido al desgaste de las unidades y la alta demanda.
La flota opera entre las 5:45 a. m. y las 10:00 p. m. a través de 32 rutas distribuidas en 12 corredores. En el Distrito Nacional funcionan 10 corredores con 24 rutas; en Santiago, seis rutas; y en Barahona, dos.
Omsa recibió recientemente la aprobación para operar un nuevo corredor que irá desde Los Alcarrizos hasta el kilómetro 22 en La Guáyiga, ampliando así su cobertura en el área metropolitana.
Transición hacia modelos eléctricos y alianzas público-privadas
Una de las estrategias a mediano plazo para enfrentar la falta de recursos es la incorporación del sector privado. La transformación de Omsa en una empresa pública mediante el decreto 167-23 busca precisamente facilitar la inversión privada. Esta apertura permitiría, entre otras cosas, la adquisición de autobuses eléctricos, opción que se considera más rentable a largo plazo.
González explicó que, aunque actualmente los autobuses son adquiridos por el Gobierno a través de los ministerios Administrativo de la Presidencia y de la Presidencia, se están explorando mecanismos para atraer inversión privada a través del Fideicomiso para el Desarrollo del Transporte Masivo (Fitram).
Costo del pasaje y sostenibilidad financiera
El pasaje en las unidades de Omsa se mantiene en 15 pesos, un precio que no ha sido ajustado en años y que representa uno de los principales atractivos del servicio. Algunas rutas cubren trayectos extensos, como desde el Hipódromo en Las Américas hasta Haina, o de la avenida Luperón hasta Los Alcarrizos, sin variación en el costo.
El administrador reconoció que este bajo costo limita la sostenibilidad financiera de la institución, aunque se espera que la implementación del Sistema Integrado de Transporte —que combinará autobuses, metro y teleférico con un solo pago— pueda mejorar la eficiencia económica. A pesar de que ya existe cierta integración con el teleférico en Santiago y Los Alcarrizos, Omsa aún no recibe compensación directa por este esquema.
Problemas de frecuencia y propuesta de carriles exclusivos
Uno de los principales reclamos de los usuarios es la baja frecuencia de los autobuses, que en algunos corredores puede ser de hasta una hora. La administración atribuye esta situación a los congestionamientos vehiculares en las principales avenidas.
Para enfrentar este problema, Omsa ha solicitado al Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant) y al Fitram la implementación de carriles exclusivos en tramos críticos de corredores como la avenida 27 de Febrero, Abraham Lincoln y otros. En algunos casos, como en Ciudad Juan Bosch o el corredor de Naco, se han logrado frecuencias de hasta siete minutos, pero estas son aún la excepción.
Omsa continúa operando en condiciones limitadas, a la espera de mayores recursos y de una reorganización estructural que le permita garantizar un servicio más eficiente, moderno y sostenible para los usuarios del transporte público urbano.
