Luego de que en la inauguración del hospital pediátrico Arturo Grullón en Santiago, la seguridad presidencial rompiera las pancartas y agrediera a mujeres y doctoras del Voluntariado Jesús con los Niños, quienes denunciaron que han muerto muchos niños por el mal trabajo de la OISOE y se estaba inaugurando el hospital sin terminar, el ministro de salud, Dr. Rafafal Sánchez Cárdenas, dijo a las mujeres del voluntariado lo siguiente:
«No les prohíbimos a nadie que haga protestas por más indelicadas que puedan ser ante la figura presidencial. Sé quienes son y el oficio que vinieron a cumplir. Uno de los primeros elementos que hay que tener en estas circunstancias es guardar la cordura y mantener permanentemente el espíritu de echar este páis adelante y no estar mirando atrás los errores que se pueden haber cometido sino el bien que estamos recibiendo hoy», expresó.
A estas declaraciones, Xenia Gell, fundadora Voluntariado Jesús con los niños, respondió con la siguiente carta:
Quiero responder al Dr. Sanchez Cárdenas, que de hecho, nunca, a pesar de todas nuestras ruedas de prensas y acercamientos al Ministerio, se acercó a escuchar el corazón de una institución que clamaba por lo que debió ser su misión, dar salud digna a los ciudadanos dominicanos , con un agravante, los nuestros son niños a los que este proceso en muchos casos le truncó la vida, en otros los discapacitó, a otros los hicieron vender lo poco que tenían para buscar en la práctica privada lo que el sistema de salud de su gobierno enmascarado en los contratos sobre valorados de OISOE no pudo ofrecerle.
No niego que al ver su persona me confundí, pensé que era diferente de lo que abunda, pero sepa que no todos tenemos precio, si usted como muchos otros se doblegó a un sistema servil, sepa que no todos somos así. Aún en este país quedamos personas pensantes y con un corazón que se doblega ante la verdad y la justicia.
Que pena me da ver hombres como usted que la vida le premió con un cargo de servicio de salud para servir a un partido y no a su patria. Me alegra mucho que sepa quien soy y que institución represento, en lo que estuvo en el poder nunca le importó, pero sepa que sigo con el mismo nombre, en el mismo lugar y con la misma posición, defender nuestro sistema de salud de autoridades tan indolentes como las que ustedes en 8 años de poder presidieron.
Ni siquiera la niñez pudo ablandar su corazón, pero en el cielo hay muchos ángeles y en la tierra muchas memorias de lo que nunca se debe repetir y sepa que por esto seguiré protestando así sea la última voz que el creador me permita en esta vida.