Corea del Norte ha expresado su total respaldo a la intervención militar de Rusia en Ucrania, según declaraciones hechas por Kim Jong Un durante la visita oficial de Vladimir Putin a Pyongyang. Durante este encuentro, ambos líderes firmaron un tratado de asociación estratégica que incluye disposiciones para la asistencia mutua en caso de enfrentar «agresiones externas». Este acuerdo se concretó en un momento crucial para Rusia, que enfrenta un aislamiento diplomático significativo desde que comenzó su invasión a Ucrania, mientras que Corea del Norte continúa bajo severas sanciones internacionales debido a su programa nuclear.
La visita de Putin fue recibida con gran pompa en la capital norcoreana, con una ceremonia de bienvenida que incluyó alfombras rojas, banderas de ambos países y retratos gigantes de Putin adornando las calles de Pyongyang. Esta recepción no solo subrayó la importancia del evento sino también la estrecha relación entre ambos países, que se ha fortalecido a lo largo de los años desde el final de la Guerra de Corea en 1953.
Durante las reuniones bilaterales, Putin destacó que el tratado de asociación global recién firmado contempla la posibilidad de cooperación militar-técnica con Corea del Norte, aunque aclaró que esto se realizaría bajo un marco estrictamente defensivo. Esta declaración no pasó desapercibida para las potencias occidentales, que desde hace tiempo han acusado a Corea del Norte de proporcionar apoyo material, incluyendo municiones y misiles, a Rusia en su conflicto con Ucrania.
Por su parte, Kim Jong Un celebró lo que describió como una «nueva era» en las relaciones bilaterales con Rusia y expresó su «pleno apoyo y solidaridad» con el gobierno ruso en su ofensiva en Ucrania. Este respaldo es visto como un gesto significativo dado el contexto internacional y las presiones económicas que enfrenta Corea del Norte debido a las sanciones impuestas por la comunidad internacional.
Además del componente militar, el tratado también contempla áreas de cooperación económica y política entre ambos países, lo que refleja una alianza que busca fortalecerse mutuamente frente a las presiones externas. Putin, en su declaración pública, elogió a Kim Jong Un como un «mejor amigo» de Rusia y agradeció el apoyo constante de Corea del Norte en momentos críticos.
El encuentro entre ambos líderes marcó el segundo encuentro en menos de un año, después de la visita de Kim a Rusia en septiembre anterior. Esta serie de intercambios diplomáticos y visitas de alto nivel subrayan la importancia estratégica que ambos países otorgan a su relación bilateral, especialmente en un contexto global marcado por tensiones geopolíticas y conflictos regionales.
En resumen, la firma del tratado de asociación estratégica entre Rusia y Corea del Norte representa un paso significativo en la consolidación de una alianza que busca reforzar su posición frente a las presiones externas y fortalecer sus intereses comunes en el ámbito internacional.
