Somos Pueblo – Un video grabado por una cámara vehicular y difundido ampliamente en redes sociales ha desatado preocupación pública, al mostrar a un agente del cuerpo mixto de seguridad Ciudad Tranquila (CIUTRAN) en lo que aparenta ser un acto de extorsión contra un ciudadano estadounidense en la ciudad de Santiago. Las imágenes, captadas en plena vía pública, han generado inquietud sobre los controles y la rendición de cuentas dentro de las fuerzas de seguridad.
En la grabación, que ya se ha vuelto viral, se observa a un agente uniformado deteniendo al conductor extranjero, que transitaba en su vehículo por una zona urbana de Santiago. A lo largo del video, se puede escuchar al oficial solicitarle dinero al ciudadano sin ofrecer una explicación clara ni realizar procedimiento alguno que justifique la detención. El tono y la forma en que se hace la solicitud han sido interpretados como un intento directo de extorsión, alimentando el malestar de la población frente a este tipo de prácticas.
Aunque hasta el momento las autoridades no han ofrecido un informe oficial sobre el hecho, la difusión del material ha obligado a que se abra una investigación preliminar. El Ministerio de Interior y Policía, así como la Dirección General de la Policía Nacional, han sido instados por diversos sectores sociales y ciudadanos a esclarecer la situación y tomar medidas disciplinarias, de ser necesarias, contra el agente involucrado.
CIUTRAN es una unidad compuesta por efectivos militares y policiales, cuyo objetivo principal es reforzar la seguridad en zonas urbanas y rurales mediante la vigilancia conjunta. No obstante, episodios como este ponen en entredicho la integridad de sus operativos y la selección del personal asignado a tareas de seguridad ciudadana. Grupos de derechos civiles y asociaciones ciudadanas han expresado preocupación por la falta de mecanismos eficaces que garanticen transparencia en el actuar de los agentes, sobre todo en contextos donde la autoridad puede ser utilizada para obtener beneficios personales.
De acuerdo con el contenido del video, el ciudadano afectado responde en inglés a los requerimientos del agente, dejando en evidencia su condición de extranjero. A pesar de la barrera del idioma, la insistencia del agente en obtener dinero es persistente.
Diversas organizaciones sociales han solicitado que la investigación no quede limitada al agente captado en cámara, sino que se extienda a una revisión más amplia de las prácticas comunes en los retenes y operativos de CIUTRAN. También se ha planteado la necesidad de reforzar los sistemas de monitoreo interno, así como la formación ética del personal operativo.
El caso se suma a una serie de denuncias esporádicas realizadas en distintas provincias del país en los últimos años, que apuntan a comportamientos indebidos por parte de agentes del orden en funciones de patrullaje. Aunque muchas de estas denuncias no trascienden por falta de pruebas, en esta ocasión el video representa un testimonio directo y difícil de refutar.
