El gobierno venezolano calificó este viernes como un «robo descarado» la confiscación de una segunda aeronave de propiedad venezolana en República Dominicana, supuestamente por órdenes del gobierno de Estados Unidos. La cancillería acusó al secretario de Estado, Marco Rubio, de actuar como «ladrón de aviones».
Esta incautación ocurre apenas seis días después de la visita a Caracas del enviado especial de Donald Trump, Richard Grenell, un encuentro que el presidente Nicolás Maduro describió como un «nuevo comienzo». Tras esa reunión, se concretó la liberación de seis ciudadanos estadounidenses que estaban detenidos en Venezuela.
“La República Bolivariana de Venezuela denuncia ante el mundo el robo descarado de una aeronave propiedad de la nación venezolana, ejecutado por orden del secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio”, señala el comunicado emitido por el Ministerio de Relaciones Exteriores venezolano.
El gobierno de Maduro condenó la medida, calificándola de agresión directa contra su soberanía, en un contexto marcado por tensiones diplomáticas entre ambos países.
