Sam Altman, el CEO de OpenAI, hizo olas en una reciente conferencia en la Universidad de Stanford al declarar que el ChatGPT actual, específicamente el modelo GPT-4, «es el más tonto que jamás tendrán que usar». Esta declaración no solo sorprendió a la audiencia, sino que también estableció grandes expectativas sobre los futuros desarrollos de la inteligencia artificial.
Durante un seminario de preguntas y respuestas, Altman reveló que, a pesar del inmenso costo operativo que implica mantener y desarrollar estas tecnologías, está decidido a invertir en lo que considera el verdadero potencial de las herramientas de AI. Según Altman, el costo de GPT-4 ha sido elevado, alcanzando los $520 millones solo el año pasado, lo cual no parece preocuparle en exceso, sugiriendo una perspectiva más orientada al producto que a las finanzas.
Altman también adelantó que GPT-5 será significativamente más inteligente que su predecesor y que están en la carrera para lanzar una nueva herramienta que podría competir con el motor de búsqueda de Google, con posibles anuncios que podrían coincidir con eventos tecnológicos importantes de otras gigantes como Apple.
Esta estrategia de «enviar pronto y a menudo», como describe Altman, refleja un enfoque audaz para el desarrollo de AI, enfocándose en la evolución conjunta de la tecnología y la sociedad, preparando el terreno para lo que promete ser una revolución en la inteligencia artificial en los próximos años.
