SANTIAGO- Un grupo de reconocidos expertos ambientalistas del país presentó su respaldo al proyecto de tiendas de campaña “Alto de las Manaclas”, desarrollado para comunitarios del paraje de Piché en el Pico Diego de Ocampo.
Mediante un comunicado de prensa, los expertos ambientales Bolívar Troncoso, ambientalista y experto en ecoturismo y geografía; Leonel Mera Bueno, ambientalista y expresidente del CODIA Regional Norte y de la Sociedad Ecológica de Santiago (SOECI); José Mercedes, Investigador Asociado del Instituto Dominicano de Investigación Agropecuarias y Forestales, IDIAF; y Eric Mercedes, Master en Ingeniería Ambiental y Consultor Ambiental, afirman que el proyecto “Alto de las Manaclas” ha sido concebido con total respeto al Medio Ambiente y los Recursos Naturales, cumpliendo con la sostenibilidad y la integración de las comunidades.
Sostienen que el proyecto ha cumplido con las normativas establecidas por el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales de la República Dominicana (Medio Ambiente) de acuerdo con las leyes 64-00 General de Medio Ambiente y 202-04 Sectorial de Áreas Protegidas.
Precisan que el proyecto comunitario ha recibido de Medio Ambiente la Concesión Ecoturística correspondiente que le permite instalarse y realizar actividades de alojamiento y complementarias en los predios del Monumento Natural Pico Diego de Ocampo.
Las Concesiones Ecoturísticas son unas de las herramientas de conservación y administración establecidas a nivel global y en las leyes dominicanas, junto a los Co-manejos, para incentivar la visita a áreas protegidas, generando los recursos económicos necesarios para conservar las áreas” sostienen.
Los expertos explicaron que las concesiones buscan incentivar las distintas actividades económicas ecoturísticas mediante la creación de las micro y pequeñas empresas que involucren a las comunidades del entorno como aliados en la preservación de las áreas protegidas.
Citaron como ejemplos de éxito en lograr metas de conservación los casos de isla Saona en el Parque Nacional Cotubanamá; Monumento Natural Isla Catalina; Villa Pajón en el Parque Nacional de Valle Nuevo; Monumento Natural Cueva de Los Tres Ojos; Monumento Natural Salto del Limón en Samaná; Los 27 Charcos de la Damajagua en Puerto Plata; Monumento Natural Loma Isabel de Torres, entre muchos otros.
El proyecto Alto de las Manaclas, a ser el primer y único en su tipo en la Loma Diego de Ocampo y la provincia, consiste en un alojamiento en tiendas de campaña y servicios turísticos complementarios de alto estándar y calidad o “Glamping”, como se denomina en inglés, que ofrecerá sus servicios a visitantes o turistas nacionales e internacionales.
Las tiendas de campaña serán desplegadas en un terrero de propiedad privada con una extensión superficial de aproximadamente 16 tareas, que fueron adquiridas en el año 1993. El alojamiento consta de 10 tiendas de campaña de seis personas; cinco tiendas de campaña de ocho personas; área de acampamiento múltiple; centro de recepción de visitantes; áreas de comedor y uso público; área de servicios; baños; planta de tratamiento de aguas servidas; generación energía eléctrica alternativa, entre otros. Todo de acuerdo con lo establecido en la concesión ecoturística otorgada por el Ministerio de Medio Ambiente.
Las actividades recreativas complementarias en el entorno del monumento natural serán visitación al mirador del Pico Diego de Ocampo; senderismo; cabalgatas; bicicletas de montaña; observación de biodiversidad; aventura; entre otras.
El proyecto garantiza la sostenibilidad de sus operaciones al cumplir con las normativas locales y globales que le permitirá certificarse como proyecto sostenible, ecoturístico y rural, siendo amigable con el medio ambiente, en armonía con el entorno natural, generador de riqueza para aportar a la conservación de los recursos naturales a través de la autosuficiencia económica del área protegida, involucramiento de las comunidades y otorgándoles la oportunidad de desarrollo, progreso y bienestar real.
La concesión ecoturística contempla el pago a Medio Ambiente de una cuota establecida por cada visitante que utilice el alojamiento, lo que deberá ser utilizado para la conservación del área protegida y en programas y proyectos con las comunidades del entorno.
