Baní.-El cuerpo de regidores del Ayuntamiento de Bani aprobó este conceder el permiso de uso de suelo para la explotación con fines comerciales de dos nuevas granceras, una en la parte alta y la otra en la zona llana o baja de desembocadura del río Baní, durante una sesión celebrada el pasado miércoles once del presente mes y a la cual no fueron invitados los periodistas y medios de prensa de esta ciudad.
La primera grancera está ubicada en el llamado sector La Cabrita, zona de El Corbanal, zona costera del valle de Peravia, donde existen plantaciones agrícolas y por lo general cuando hay temporadas de lluvias abundantes las aguas de dicho río producen inundaciones a los sembradíos.
La otra grancera está ubicada en la zona conocida como Las Yayitas, en la parte alta sobre el río Baní, donde sus proponentes justifican su solicitud en que las rocas y otros materiales que serán extraídos serán utilizados en el muelle que se construye en el proyecto hidroeléctrico de Punta Catalina.
En los documentos de solicitud de permiso de uso de suelo los proponentes presentaron a los regidores ningún estudio de impacto ambiental, ni permisos de los Ministerio de Medio Ambiente, Industria y Comercio y otras instituciones del Estado vinculada a este tipo de empresas.
De permitirse estas dos nuevas granceras, las mismas se unen a otras 10 o 12 empresas de agregados de construcción que funcionan en la zona oeste, camino hacia Azua, en la zona de Galeón en la carretera Sánchez, las cuales han provocado túneles o cráteres en el cauce de los arroyos Bahía, Pinzón, Virreina, Panzo,; además de inundaciones y daños a los habitantes y predios agrícolas de las comunidades de El Cañafistol y Villa Sombrero.
La aprobación contó con el voto favorable de los regidores del PLD, Lucila Mojica, José Tejada, Miguelina de la Cruz, Ascanio Cruz Moya; la regidora del PRD Yomaira Peña y los regidores del PRM Diego Soto, Juan Germán y Luis Báez.
Se opusieron y votaron en contra los regidores del PRD Cristian Castillo, Leónidas Díaz y Carolina Díaz.
La regidora Carolina Díaz justificó su oposición a dichas plantas argumentando que el río Baní no debe ser sometido a la extracción de materiales de construcción, porque sobre el cauce del mismo lo que se precisa es que el gobierno termine los trabajos de construcción del muro para facilitar su canalización hacia la desembocadura del mar Caribe y evitar de esa manera inundaciones a los asentamientos humanos y los predios agrícolas que están en la zona llana o baja.
Dijo además, que el permiso aprobado para la grancera en Las Cabritas causará daños a las urbanizaciones y proyectos habitacionales en construcción debido a que esa planta emitirá al medio ambiente elementos contaminantes, indicando que el ruido de los volteos y vehículos pesados que transportaran esos agregados ocasionarán daños a las vías terrestres.
“No es posible que el Ministerio de Medio Ambiente otorgue permiso para que esas empresas operen en Bani, a pesar del permiso para uso de suelo que se aprobó. Más todavía cuando en esa zona el gobierno tiene programado construir una avenida tipo ‘bulevar’ para el proyecto turístico de Punta Arena, en Los Corbanitos, invertirá el grupo Punta Cana de Frank Rainieri” dijo Díaz.
