Aunque iniciado este año los casos de dengue mantienen una tendencia hacia la disminución con baja presencia de pacientes en los centros de salud, en la semana epidemiológica del 8 al 14 de diciembre, el sistema captó 360 casos probables, para un acumulado de 1, 878 casos en las últimas cuatro semanas epidemiológicas, lo que evidencia una reducción con relación a lo ocurrido meses anteriores cuando cada semana se notificaban sobre los 600 casos.
La última epidemia de dengue que había registrado el país ocurrió en el 2015, donde el sistema notificó de manera oficial 104 fallecimientos y 17,051 afectados; mientras al año siguiente, el 2016, el número de fallecidos fue de 39 y los afectados 6,645 por esta enfermedad, año en que la población fue afectada además por una epidemia del virus del zika.
El dengue es una enfermedad febril provocada por la picadura del mosquito Aedes aegypti que se cría en aguas limpias, sobre todo la que se acumula en las casas y sus alrededores.
Si hay fiebre alta que inicia de manera súbita, dolor de cabeza y muscular, detrás de los ojos, malestar general, es señal de dengue no grave. Si presenta vómito y dolor abdominal, es señal de que se complica y evoluciona a dengue grave, lo que requiere de atención médica de emergencia.