Discusiones y conflictos entre alumnos que han terminado en asesinatos, varios jovencitos obligaron a una adolescente a practicarles sexo oral en una escuela de Puerto Plata, regalos de un joven a otro joven que era su pareja dentro de un plantel escolar, riñas escolares que dejaron a la niña Chanel Marie Tiburcio, de 11 años muerta, escuelas que juntas de vecinos han cerrado porque los estudiantes la usan para consumir drogas y llevar armas de fabricación casera. Son hechos que han generado opiniones encontradas, controversias, e incluso, han llegado a replantear y cuestionar el papel tanto de la comunidad educativa, docentes, como de los que figuran como policías escolares, y por supuesto la misión de la institución académica de enseñar y la falla de la llamada «REVOLUCIÓN EDUCATIVA» que tanto alaba el presidente Danilo Medina y su gobierno.
Otra de las riñas que quedaron registradas en cámara fue la de dos niñas que, mientras discutían, se halaban el pelo y se agredían ante la mirada de varios de sus compañeros de clases que las estimulaban a seguir enfrentadas. Se dio a conocer, además, que este hecho tuvo lugar en el Liceo Francisco Henríquez y Carvajal, en Cotuí.
En Villa Mella, la agresión se tornó similar, pero con el agravante de que el menor fue agredido con un arma blanca en las inmediaciones del Centro Educativo Militar San Miguel Arcángel “El polvorín”. Actualmente está bajo observación médica en el Hospital Hugo Mendoza. El vocero de la Policía Nacional, Frank Félix Durán Mejía, agregó que fue identificado el agresor, quien tiene 15 años de edad.
Otro hecho violento ocurrió ayer viernes en un centro educativo de San José de Ocoa. Dos jóvenes, de 16 años, convirtieron el aula en un ring de combate en donde los espectadores y sus compañeros de estudios aplaudían, se reían y hacían “sus apuestas” simbólicas como si se tratara de una pelea de boxeo profesional.
Llama la atención que en cada caso, las autotridades del aula, el profesor, ni el director del centro educativo han hecho acto de presencia para frenar la situación y amonestar a los implicados.
