Sucia y tiznada de carbón y produciendo daños al medio ambiente…¿Qué encantos tiene que a todos encanta?
Fue traída y vendida en la isla por unos cariocas que a «ritmo de samba» pusieron a bailar al nuevo gobierno, al punto que el Presidente quedó prendado y enamorado perdidamente de ella.
Descubierto en sus lides amatorias prostituidas entre maipiolos o proxenetas, el amante de Arroyo Cano -San Juan de la Maguana- buscó el apoyo de «notables», que justificaran sus andanzas deleznables, llenas de carbón corruptor.
¡Demasiado tarde pues el escándalo vino de playas extranjeras!
Sus atributos van más allá de los característicos de cualquier meretríz que ejerza el oficio más grande del mundo, pues en lugar de cobrar por sus servicios, les llena los «bolsillos de lana» a todo aquel que embeleza en mágico sortilegio:
-El destacado economista Jaime Aristy Escuder sucumbió al hechizo y pasó a ser Administrador General, luego de haber sido miembro de la Comisión para licitación y adjudicación.
– El experimentado periodista Wilfredo Alemany atraido por el perfume embriagador de las papeletas, se convierte en el vocero y Director de Comunicaciones, de la conocida «ramera energética».
– El conocido cabildero y economista Andy Dauhjre en principio consultor para evaluar las propuestas de la puta por US$500 mil, sucumbió a la seducción y en solo dos meses pasa a firmar un contrato por US$3.3 millones.
¿Que tienen en común éstos tres hombres?
Son individuos conocedores y experimentados en los asuntos del «Sistema» – Establishment- lo cual se ha convertido en condición indispensable, para justificar la prostitución, corrupción y el dinero que ha costado el famoso y más «Caro Cuero» como diría coloquialmente un otrora «hijo de Machepa», ahora encumbrado en los sectores de Poder y el Gobierno.
¿Cuál es la peor situación generada?
Que la República Dominicana ha sido convertida en un prostíbulo gigantesco de 48 mil kilometros cuadrados y 10 millones de «clientes», que con el sudor de su frente tendrán que pagar por años los desaciertos y platos rotos de una fiesta de Cabaret, en la cuál no todos participaron.
Tomado del muro de Facebook de Nestor Julio González
